Las cartas son un espejo. No dictan un destino, pero te muestran las puertas que puedes abrir si eliges hacerlo. 

El tarot no predice el futuro; ilumina el presente. Es un reflejo de tu energía, una herramienta que te ayuda a comprenderte, ordenar lo interno y tomar decisiones desde un lugar más consciente.

Estas sesiones se centran en el crecimiento personal y la evolución espiritual del consultante, por eso exploraremos: 

-Los patrones y hábitos que pueden estar limitando tu crecimiento.

-Nuevas perspectivas para abordar los desafíos de tu vida.

-La conexión con tu propia sabiduría y tus emociones.

-Formas de alinear tus valores y propósitos con tu día a día. 

Las cartas te ayudarán a conocer tu energía actual para poder utilizarla a tu favor.